Mi Taller de Scrap

Esta semana estuve reflexionando mucho acerca de lo que busco con el scrap... cuáles son mis objetivos, mis gustos y qué de nuevo puedo aportar en un mundo que parece abarrotado de información. La verdad es que llegué a muchas conclusiones, entre ellas, que este ambiente está plagado de materiales que nos arrastran a un consumismo desenfrenado y que cada vez nos aleja más de la creación personal.

Soy una loca de los blogs y en muchos casos veo que se encargan de repetir no sólo post de otros autores sino también de repetir trabajos de otros, paso a paso... milímetro a milímetro...

Por ello, después de darle muchas vueltas en la cabeza, decidí hacer un pequeño aporte, un poco de "aire fresco" a la locura scrapera.

Mis objetivos principales con dos: Uno, mantener la creatividad personal y la imaginación por sobre todas las cosas y dos, hacer trabajos bonitos intentando gastar lo menos posible, explotando mis otras ¿cualidades?

Es entonces que abro una nueva etapa de mi taller con un post muy especial...

El mundo de las manualidades es muy amplio y cada vez son más las posibilidades de entrecruzar distintas disciplinas. 

Me encantaría agregar ilustraciones pintadas a mis trabajos, pero como mi presupuesto no alcanza para comprar todos los copics, promakers y similares, decidí retomar mis pinceles y mis acuarelas.

Las acuarelas no son complejas de utilizar, sólo hay que tomar un poco de práctica y aprender algunos truquillos que iré explicando con el tiempo.

No es necesario comprar una amplia gama de colores, ni que su precio sea demasiado alto... incluso se puede comenzar (para probar si nos sentimos cómodas para trabajar), con las acuarelas escolares.

Las acuarelas se pueden conseguir de dos tipos (en realidad son tres, pero comprarlas de forma líquida es excesivamente caro): en pastillas y en tubos... los lápices acuarelables con otra opción muy interesante.

Lo bueno y malo de cada una? Tanto una como otra se utilizan con mucha agua por lo que el gasto en cada uso es mínimo. Los tubos se pueden a llegar a secar, las pastillas se pueden humedecer, romper... si son escolares, los colores no son tan brillantes.

En mi caso prefiero las acuarelas en tubos... es más, estas de las fotografías las he comprado en el 2010 y todavía tienen vida para darme...son más versátiles y me siento más cómoda trabajando con ellas.

En los siguientes días, veremos cómo comenzar a trabajar con los pinceles... se los recomiendo 100% pues queda muy bonito, es muy terapéutico y, además, con poco nos puede dar muchas satisfacciones.

Hasta mañana!!!